Era un secreto a voces, pero ahora un importante empresario confirma que Millonarios manda en la Dimayor

Eduardo Pimentel, propietario de Boyacá Chicó, lanzó duras acusaciones contra Fernando Jaramillo, presidente de la Dimayor, a quien señaló de ser influenciado por Gustavo Serpa, máximo accionista de Millonarios, en la gestión del fútbol colombiano. Las declaraciones de Pimentel llegaron tras el polémico ascenso de Llaneros y Unión Magdalena al fútbol de la Categoría A, un escándalo que generó una gran controversia.

El presidente de la Dimayor estuvo presente durante la premiación en el Torneo de Ascenso, donde los equipos ascendieron a la Primera División, y en ese contexto, Pimentel arremetió contra él. En sus palabras, expresó que el mejor trabajo de Jaramillo en la Dimayor era "hacerle caso a Serpa y repartir medallas y trofeos". Este comentario refleja la frustración de Pimentel por lo que considera una falta de imparcialidad en la organización de los torneos.

La ausencia de Jaramillo y la controversia por el ascenso

El comentario de Pimentel se volvió aún más relevante cuando, al día siguiente, Fernando Jaramillo no se presentó para entregar las medallas a Atlético Nacional tras su victoria en la Copa Colombia 2024. La ausencia de Jaramillo en un acto tan simbólico fue interpretada por muchos como un signo de desorganización y falta de compromiso con los eventos importantes del fútbol colombiano.

El escándalo sobre el ascenso de Llaneros y Unión Magdalena a la Categoría A ha puesto bajo la lupa la gestión de Jaramillo y su relación con los clubes más poderosos del país. Las acusaciones de Pimentel no hacen más que profundizar la crisis de confianza que rodea a la Dimayor, especialmente en un momento en que la transparencia y la equidad son esenciales para el futuro del fútbol colombiano.

Un fútbol colombiano en crisis

Las declaraciones de Eduardo Pimentel no son una sorpresa en un contexto de creciente desconfianza hacia la Dimayor. La polémica sobre el ascenso de Llaneros y Unión Magdalena ha puesto en evidencia las tensiones entre los clubes más grandes y los más pequeños del país, así como la percepción de que las decisiones no siempre son tomadas de manera imparcial.

Las críticas a Fernando Jaramillo y su aparente cercanía con Gustavo Serpa son un reflejo de la falta de transparencia que ha afectado al fútbol colombiano en los últimos años. Mientras tanto, los aficionados y los clubes esperan que se tomen medidas para mejorar la gestión de la Dimayor y devolver la credibilidad al campeonato.

• Acusaciones de favoritismo: Eduardo Pimentel señaló que Fernando Jaramillo actúa bajo la influencia de Gustavo Serpa, dueño de Millonarios.
• Polémica del ascenso: El ascenso de Llaneros y Unión Magdalena al fútbol de la Categoría A fue el detonante de las críticas.
• Ausencia de Jaramillo: Jaramillo no apareció para entregar las medallas a Atlético Nacional tras su victoria en la Copa Colombia.
• Desconfianza en la Dimayor: Las declaraciones de Pimentel reflejan la creciente desconfianza hacia la gestión de la Dimayor y la falta de transparencia en el fútbol colombiano.