Los excesos lo consumieron, la promesa de la Selección que hoy vive en el olvido

La Selección Colombia con el paso de los años contó con la posibilidad de tener en sus plantillas a grandes talentos, esto fue fundamental para que la ‘tricolor’ consiguiera regresar a competir en los campeonatos del mundo. A pesar de tener un destacado nivel de competencia, para desgracia de todos los aficionados colombianos, muchos jóvenes talentos se fueron quedando en el camino.

Uno de los torneos que más ilusión genera en todos los colombianos, son los que llegan a disputar las categorías inferiores, en especial los que juega la Selección Colombia Sub-20. En estos campeonatos, muchos jóvenes talentos comienzan a mostrar todo su talento, perfilándose como grandes candidatos a destacarse en el seleccionado de mayores. Sin embargo, las malas decisiones y las lesiones constantes han dejado mermados a muchos de estos proyectos a futuro.

El caso más conocido es el del mediocampista Juan Pablo Pino, desde muy joven este futbolista demostró el talento necesario para convertirse en una de las máximas estrellas del fútbol colombiano. Sin embargo, con el pasar de los años, este volante fue cayendo en su nivel de competencia, a tal punto de que, en los últimos años, no se tiene la certeza de su actividad deportiva.

Juan Pablo Pino durante su carrera supo jugar en ligas como la de Francia, Grecia, Indonesia, China y Arabia Saudita. A pesar de que pasó por una gran cantidad de equipos, los excesos y la mala preparación física lo llevaron a terminar de la peor manera. En su regreso al fútbol colombiano, se pudo ver a un futbolista totalmente diferente, el cual desperdicio todo su talento como deportista profesional.

Talento desaprovechado

En una de sus ultimas declaraciones, el mediocampista comentó que, "en toda mi carrera me desvié un poco y creo que tuve actos de indisciplina de los que ahora me arrepiento. Creo que si hubiera sido un profesional a la altura, hubiera jugado en equipos más grandes de los que jugué”. 

Actualmente, Juan Pablo Pino se encarga de potenciar el talento de varios jóvenes talentos, con la intención de seguir viviendo del deporte y en especial de mostrar su vida como un claro ejemplo de lo que no se debe hacer. Con esta intención, el mediocampista de 36 años quiere comenzar a sentar las bases de un proyecto deportivo dirigido por él, en el que se pueda potenciar a nuevas figuras del fútbol colombiano.