Por David Arengas
Las declaraciones de Rodri Hernández han puesto el dedo en la llaga de una realidad latente en el fútbol español: la influencia desmesurada de los medios de comunicación en la percepción de los jugadores y en la elección de los premios individuales.
El caso de Vinícius Júnior es paradigmático. Su talento indiscutible, su carisma y, sobre todo, el respaldo mediático que ha recibido por parte de la prensa española, especialmente de aquellos medios afines al Real Madrid, lo han convertido en el gran favorito para el Balón de Oro. La imagen de Vinícius como un joven promesa que ha revolucionado el fútbol español ha sido constantemente reforzada por los medios, creando una narrativa que lo sitúa por encima del resto de los candidatos.
¿Y qué hay de Rodri? A pesar de sus excelentes actuaciones y su papel fundamental en el éxito del Manchester City, el centrocampista español no ha recibido el mismo trato mediático. Su estilo de juego, más discreto y menos vistoso, no encaja en el relato épico que los medios buscan construir en torno a los grandes premios individuales.
Los medios de comunicación tienen un poder enorme para influir en la opinión pública y en la percepción que tenemos de los deportistas. A través de la selección de noticias, la elección de los ángulos desde los que se cuentan las historias y la repetición de ciertos mensajes, los medios pueden construir narrativas que favorecen a unos jugadores y perjudican a otros.
En el caso de Vinícius Júnior, los medios han creado una imagen de un jugador casi invencible, capaz de cambiar el rumbo de un partido con una sola jugada. Esta imagen, aunque en parte sea cierta, ha sido amplificada y repetida hasta el punto de convertirse en una verdad incuestionable.
Es fundamental que los aficionados al fútbol sean capaces de analizar de forma crítica la información que reciben de los medios. No debemos dejarnos llevar por las narrativas que nos imponen, sino que debemos formarnos nuestra propia opinión basándonos en los hechos y en nuestro propio criterio.
En conclusión, la doble moral en el fútbol español es evidente. La forma en que los medios tratan a jugadores como Vinícius Júnior y Rodri demuestra que la elección del Balón de Oro no siempre se basa en criterios puramente deportivos, sino que también está influida por factores externos como la popularidad, el marketing y la influencia de los clubes. Es hora de que los aficionados exijamos un periodismo deportivo más riguroso y menos sesgado.
22/12/2024
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